Museo Diocesano de Tarragona
Exposición “De la Maternidad a la Natividad, 800 años del primer pesebre»
22.11 – 21.12.2023
Tarragona
mármol de Santa Tecla, 80 cm
Representando el arte sacro de los siglos XX y XXI, la escultura MARIA de Guido Dettoni della Grazia ha formado parte de la exposición “Natus est en Betlem. Un viaje por los 800 años del primer belén “, con motivo del 800 aniversario del primer belén que San Francisco de Asís colocó en una pequeña gruta en la localidad italiana de Greccio durante la misa de Nochebuena de 1.223, organizada por el Archidiócesis de Tarragona, a través de la Delegación Diocesana de Cultura, que tuvo lugar en diciembre de 2023 en el Centro Tarraconense El Seminario. colocó en una pequeña gruta en la localidad italiana de Greccio durante la misa de Nochebuena de 1.223, organizada por el Archidiócesis de Tarragona, a través de la Delegación Diocesana de Cultura, que tuvo lugar en diciembre de 2023 en el Centro Tarraconense El Seminario..
Se podría decir que esta ampliación, de 80 centímetros de altura, es la escultura MARIA tarraconense de Guido Dettoni. Está esculpido en mármol de Santa Tecla (patrona de Tarragona) de la cantera de Santa Tecla, hoy cerrada, junto a la ermita de Loreto en Tarragona. El mármol fue preparado para la escultura del artista en Marbres Castelló, una fábrica dedicada al procesamiento de mármol y granito, también con sede en Tarragona.
La escultura se realizó para la exposición “MARIA madre de Dios” celebrada en el Antiguo Refectorio de los Canónigos de la Catedral de Tarragona en 1999, y posteriormente, dada por la empresa Vodafone (antigua Airtel) pasó a formar parte de la colección del Museo Diocesano de esta antigua ciudad romana.
«De la maternidad al pesebre, un recorrido por los 800 años del primer pesebre» estuvo formada por una serie de escaparates temáticos y cronológicos que conformaron un breve recorrido por la historia del arte. La exposición comenzaba con una edición facsímil del Codex Sinaiticus, la Biblia más antigua que se conserva, y continuaba con una primera colección de piezas relacionadas con la maternidad; como su representación de Nigeria, de la colección de Jesús Arjona, utilizada en rituales para honrar a las mujeres; algunas imágenes marianas como la Virgen de Valldossera, una mayólica del siglo XVI, un óleo sobre cobre de la Virgen del Socorro, y la escultura MARIA de Guido Dettoni, una Virgen abstracta que representa la cultura de los siglos XX y XXI.
Tras este primer espacio dedicado a la maternidad, el itinerario pasaba a la temática de la Natividad, empezando por una reproducción de un sarcófago paleocristiano del siglo IV, que contiene la representación más antigua de la Natividad, con María y el Niño, los Reyes Magos, el buey y la mula y el pastor. También había una edición facsímil de la Biblia de Ripoll del siglo XI, un óleo sobre cobre de la Casa Balcells, un pacificador con el Nacimiento de la Iglesia Prioral de San Pedro Apóstol de Reus y diversas Biblias ilustradas del siglo XIX. Finalmente, el recorrido expositivo culminaba con el pesebre de la Casa Canals, con figuras del año 1800, que se conservan en el Museo Diocesano de Tarragona, y que el pesebrista Quim Nolla inserta en el contexto de un gran pesebre en el que encontramos una reproducción exacta de la capilla de Sant Pau dentro de El Seminari.
Imagen de la Virgen María, de la Catedral (s. XX)
Texto de la cartela de la obra MARIA en la exposición
La imagen de María se puede presentar desde un lenguaje formal «puro»
desprovisto de concreción física para incidir en la esencia final de lo que se quiere representar. Una interesante escultura de mármol representando a la Virgen María (1999) es concebida desde una concepción de abstracción figurativa (MDT-D-0219).
Es obra MARIA de Guido Dettoni della Grazia. La escultura queda soportada por un pilar de piedra caliza con la inscripción de un poema de Carlos Duarte que proclama: “Eres la madre, el origen, la vida donde Dios se arrecerá. Las manos son una estancia en la que aprendo a invocarte“. El autor Guido Dettoni nos acerca a un mundo espiritual moldeando la materia entre sus manos. Para él «las manos ven, los ojos tocan». Concibe a MARIA como un icono poliédrico que representa a María, la madre de Jesús del Evangelio, pero también evoca a Maryam de la Sura 19 del Corán, Shakti del hinduismo, Kuan-yin de la tradición china y la imagen de la feminidad de muchas culturas del mundo.
Para el observador cristiano, desde sus códigos culturales y espirituales, la imagen de María de Guido Dettonise presenta abierta a múltiples lecturas: ¿Una llama encendida para iluminar a la humanidad?, ¿una Madre protegiendo a su hijo con su manto? ¿una huella de la dýnamis divina que actúa sobre la materia para transformarla en espíritu?,… Tal vez la forma que aquí adquiere la materia esculpida es una vía abierta para encontrar los atributos esenciales de la Virgen María. Y es que ésta es, en definitiva, la función final del arte sacro de todos los tiempos: un elemento litúrgico, una expresión catequética pero sobre todo un vínculo de comunicación con la Fe y la oración.